Durante los últimos meses hemos tenido entre manos un proyecto precioso, del que aún no habíamos contado mucho. Hemos estado trabajando en la estrategia de sostenibilidad de Pueblos Remotos, sentando sus bases e implementando acciones concretas, como el cálculo de la huella de carbono.
Ha sido toda una experiencia, y un placer personal, poder liderar y gestionar este proyecto, para y con un equipo en el que realmente creo. Lo que comenzó como “un proyecto más”, ha terminado convirtiéndose en un pequeño baby dentro de la familia de Pueblos Remotos, que ha venido para quedarse y crecer con nosotros poco a poco.
Un proyecto ASG con alma
¿Y en qué ha consistido este proyecto que tanto cariño me ha generado? Pues ha abarcado bastante.
A finales del año pasado encontramos una oportunidad para dar un paso más en nuestra estrategia de sostenibilidad, gracias a una financiación europea dirigida a pequeñas empresas de impacto social. Junto con Elsa Rodríguez, cofundadora del proyecto, y justo antes de su baja por maternidad, presentamos una propuesta ambiciosa (¡porque sí, en sostenibilidad queremos darlo todo!), y buenas noticias… ¡nos la concedieron!
Elsa, te echamos mucho de menos en el proceso, pero este también es tú baby, ¡el otro! 😉El proyecto europeo se llama ‘Green at Heart’, cofinanciado por la Unión Europea y promovido por Impact Hub (Ámsterdam, Madrid y Viena) junto a departamentos de impacto de esas ciudades. No fue solo un recurso económico, sino un programa formativo y de acompañamiento que incluyó hasta un Bootcamp en Viena, donde nos reunimos con otras empresas para aprender y compartir retos reales. De allí, incluso han surgido nuevas colaboraciones.
Ha sido toda una experiencia, y un placer personal, poder liderar y gestionar este proyecto, para y con un equipo en el que realmente creo. Lo que comenzó como “un proyecto más”, ha terminado convirtiéndose en un pequeño baby dentro de la familia de Pueblos Remotos, que ha venido para quedarse y crecer con nosotros poco a poco.

Bootcamp del proyecto Green at Heart en Viena con otros empresas de impacto
Este impulso encaja perfectamente con nuestra intención de que la sostenibilidad no solo esté en lo que hacemos —experiencias, actividades, conexión con el territorio— sino también en cómo lo hacemos: en nuestras decisiones diarias, procesos y forma de operar.
Política de sostenibilidad y huella de carbono
Durante estos meses, hemos trabajado en dos grandes líneas:
- Crear nuestra Política de Sostenibilidad, donde definimos compromisos y principios de actuación. Esto también nos ayudó a retomar el trabajo estratégico de fondo.
- Calcular la huella de carbono, de la empresa y nuestras experiencias, y formarnos para poder hacerlo cada año a nivel interno.
Para esto, nos aliamos con Espacio Suministro, y en especial con Nuria Rodríguez, de Ecomimética. Ella impartió las formaciones y llevó a cabo el cálculo de la huella, y el informe final y Plan de Reducción y Compensación. Las dos Nurias hemos sido el dream team de esta parte del proyecto. Y sí, lo confesamos: somos unas frikis de la sostenibilidad y hemos disfrutado del proceso. 😂

Formación sobre huella de carbono e impacto ambiental con Nuria Rodríguez (Ecomimética)
¿Y quién soy yo para contarte esto?
Para quienes no me conocen, soy Nuria Fernández, consultora en sostenibilidad. Vengo del mundo de la arquitectura sostenible, aunque hoy me centro en enfoques regenerativos (¡lo que da para otro blog!), y me he formado también en innovación social y estrategia en sostenibilidad.
Conocí Pueblos Remotos participando en una de sus experiencias de co-living en Almagro, en marzo de 2024. Fue ahí donde me enamoré aún más del proyecto, no solo por su propósito, sino por quiénes lo promueven y cómo lo hacen.
Mi colaboración con el equipo comenzó el pasado noviembre. Desde entonces, he trabajado desde dentro de la organización y mi rol ha sido algo así como el de una consultora de innovación y sostenibilidad. He podido meter la “naricilla” en todas las áreas interesantes que el tiempo me ha permitido, diseñando y facilitando jornadas para emprendedores sociales en entornos rurales, participado en proyectos europeos con partners internacionales… pero, sin duda, este proyecto ASG ha sido el que más atención me ha ocupado (y con gusto).

Facilitación de dinámica con emprendedores sociales
Y es que, cuando tienes una vocación clara, inevitablemente encuentras esos proyectos que te inspiran y motivan.
Huella de carbono como medida de impacto
Volviendo al proyecto, ¿por qué, entre otras muchas acciones posibles, elegimos medir la huella de carbono?
Aunque como empresa de servicios nuestras emisiones no son muy altas comparadas con sectores industriales y otras escalas de empresa, sabíamos que uno de nuestros mayores impactos estaba en las experiencias con teletrabajadores y estudiantes, especialmente por el uso del transporte aéreo.
Pero… ¿cuánto representa ese impacto en realidad? ¿Cómo se compara con otras áreas? ¿Dónde debemos poner el foco para reducir?
La única forma de responder es cuantificando con datos reales, pues como bien dicen: ‘no se puede mejorar lo que no se mide’.
¿Y si no podemos reducir todo?
Es cierto, no siempre se pueden reducir las emisiones, ya sea por limitaciones técnicas, económicas o de contexto. Ahí entra en juego la compensación, que no debe ser una excusa ni un parche, pero sí una herramienta complementaria que nos permite devolver al planeta parte de su capacidad de absorción de carbono.
En nuestro caso, hemos compensado un 10% de nuestras emisiones como organización colaborando con la Fundación Foresta, un proyecto de reforestación en Canarias que trabaja por la restauración del patrimonio natural del archipiélago.
Conocí Pueblos Remotos participando en una de sus experiencias de co-living en Almagro, en marzo de 2024. Fue ahí donde me enamoré aún más del proyecto, no solo por su propósito, sino por quiénes lo promueven y cómo lo hacen.
El reto de la sostenibilidad en pequeñas empresas
Integrar la sostenibilidad en el día a día ya es un reto para cualquier empresa, pero para pequeñas y medianas empresas, incluso emprendimientos y microempresas, con recursos limitados, puede ser aún más complejo.
Hoy en día faltan apoyos, formación y políticas claras que impulsen este cambio de forma accesible y realista. Por eso, iniciativas como el proyecto europeo Green at Heart son tan necesarias: ofrecen herramientas, acompañamiento y visibilidad para que también las empresas más pequeñas puedan avanzar hacia un modelo más sostenible.
Porque sin ese impulso, la sostenibilidad corre el riesgo de quedar en manos de unas pocas empresas comprometidas, cuando lo que necesitamos es un cambio sistémico y colectivo.
¿Y ahora qué?
Queríamos compartir contigo todo este proceso y lo que hemos aprendido. A día de hoy:
- Nuestra Política de Sostenibilidad está integrada en nuestros procesos.
- Tenemos en progreso un plan de medidas a implementar en los próximos años.
- Y seguiremos midiendo nuestra huella cada año, con el objetivo de reducir y mejorar continuamente.
Además, te contaremos pronto los resultados en redes y compartiremos públicamente tanto la Política de Sostenibilidad como el Plan de Reducción y Compensación.
De hecho, ya hemos contado algo sobre esto el pasado mes de Julio, cuando compartimos webinar con Nuria Rodríguez (Ecomimética) y Sergio Armas (Fundación Foresta), para poner estos temas sobre la mesa, analizar los pros y contras de medir la huella y abrir el debate.Si te interesa puedes ver la grabación del webinar aquí.
Porque esto va más allá de las empresas
Aunque estos temas suenen corporativos, todos tenemos un impacto, ya sea como empresa, como grupo o como personas individuales. Te invitamos a seguir aprendiendo y a dar pequeños pasos para reducir tu huella.
A nivel personal, este proyecto ha marcado una etapa profesional muy especial para mí, y también abre otra: la de seguir promoviendo la sostenibilidad en empresas de impacto.
Gracias, Pueblos Remotos, y seguimos caminando juntas.🥰

Equipo súper Pueblos Remotos celebrando la vida!